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Una antología de la Asociación Prometeo de Poesía

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Poesía de Siempre      Manuel MACHADO


Manuel MACHADO







La antología Poesía de Siempre se ha preparado con 50 poetas de lengua española contenidos en el libro Poetas del pasado, de Juan Ruiz de Torres, más otros seleccionados, ilustrados y comentados por distintos antólogos cualificados, en varios países.

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BIOGRAFÍA.
Sevilla (España), 1874-1947. Era el hermano mayor de Antonio Machado. La familia se trasladó a Madrid. Estudió Filosofía y Letras. En 1899 se fue a París, donde estuvo viviendo como traductor. Al volver a Madrid publica su primer libro de poemas. En 1910 se casó. Trabajó como bibliotecario y periodista. A partir de 1926 escribió teatro con su hermano. En 1936, encontrándose en Burgos, estalla la Guerra Civil española. En 1938 es elegido miembro de la Real Academia Española. Murió en Madrid. Entre su obra poética se encuentran: Alma, museo y cantares (1907), El mal poema (1909), Cante hondo (1912), Canciones y dedicatorias (1915), Sevilla y otros poemas (1920), Phoenix (1936) y Cadencias de cadencias (1943). (Enrique Valle)


CASTILLA

El ciego sol se estrella
en las duras aristas de las armas,
llaga de luz los petos y espaldares
y flamea en las puntas de las lanzas.

El ciego sol, la sed y la fatiga.
Por la terrible estepa castellana,
al destierro, con doce de los suyos,
-polvo, sudor y hierro-, el Cid cabalga.

Cerrado está el mesón a piedra y lodo...
Nadie responde. Al pomo de la espada
y al cuento de las picas el postigo
va a ceder... ¡Quema el sol, el aire abrasa!

A los terribles golpes,
de eco ronco, una voz pura, de plata
y de cristal responde... Hay una niña
muy débil y muy blanca
en el umbral. Es toda
ojos azules, y en los ojos lágrimas.

Oro pálido nimba
su carita curiosa y asustada.
"Buen Cid, pasad... El Rey nos dará muerte,
arruinará la casa
y sembrará de sal el pobre campo
que mi padre trabaja...
Idos. El cielo os colme de venturas...
¡En nuestro mal, oh Cid, no ganáis nada!"

Calla la niña y llora sin gemido...
Un sollozo infantil cruza la escuadra
de feroces guerreros.
Y una voz inflexible, grita: "¡En marcha!"

El ciego sol, la sed y la fatiga.
Por la terrible estepa castellana,
al destierro, con doce de los suyos,
-polvo, sudor y hierro-, el Cid cabalga.


COMENTARIOS
La voz sevillanísima de Manuel Machado -Don Manuel-, llena de gracia leve, de aciertos como chispas, de sobriedad de estilo nacida de una profunda cultura -fue bibliotecario-, la voz sutil y exacta, voluntariamente cercana a lo popular sin chabacanería: esa es la voz que suscita admiración y devoción, aunque alguna anécdota de su peripecia vital disuene de una elegancia sostenida tantas décadas. Mucho escribió -sobre todo en teatro- con su hermano Antonio Machado, a quien siempre estuvo profundamente unido. Desde su primer poemario, el Modernismo de Manuel Machado nunca se vio 'contaminado' de los 'ismos' vanguardistas, que fácilmente podría haber hecho suyos. (Juan Ruiz de Torres)