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Una antología de la Asociación Prometeo de Poesía

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Poesía de Siempre      Oliverio GIRONDO


Oliverio GIRONDO







La antología Poesía de Siempre se ha preparado con 50 poetas de lengua española contenidos en el libro Poetas del pasado, de Juan Ruiz de Torres, más otros seleccionados, ilustrados y comentados por distintos antólogos cualificados, en varios países.

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BIOGRAFÍA.
Buenos Aires (Argentina), 1891-1967. Nacido en el seno de una familia acomodada, siendo muy joven viajó a Europa , donde contactó con las vanguardias. Colaboró en revistas como Proa, Prisma o Martín Fierro, que fueron findamentales en la difusión del Ultraísmo. Publicó los libros Veinte poemas para ser leídos en el tranvía (1922), Calcomanías (1925), Espantapájaros (1932), Interlunio (1937), Persuasión de los días (1942), Campo nuestro (1946),En la masmédula (1956) y Topatumba (1958). (Enrique Valle)


APARICIÓN URBANA

¿Surgió de bajo tierra?
¿Se desprendió del cielo?
Estaba entre los ruidos,
herido,
malherido,
inmóvil,
en silencio,
hincado ante la tarde,
ante lo inevitable,
las venas adheridas
al espanto,
al asfalto,
con sus crenchas caídas,
con sus ojos de santo,
todo, todo desnudo,
casi azul, de tan blanco.
Hablaban de un caballo.
Yo creo que era un ángel.


A MI

Los más oscuros estremecimientos a mí
entre las extremidades de la noche
los abandonos que crepitan
cuanto vino a mí acompañado
por los espejismos del deseo
lo enteramente terso en la penumbra
las crecidas menores ya con luna
aunque el ensueño ulule entre mandíbulas transitorias
las teclas que nos tocan hasta el hueso del grito
los caminos perdidos del llanto en la tierra
la esperanza que espera los trámites del trance
por mucho que se apoye en las coyunturas de lo fortuito
a mí a mí la plena íntegra bella a mí hórrida vida.


COMENTARIOS
Experimentar y siempre experimentar: tal parece haber sido el lema de este argentino llamado a ocupar sitios importantes en la poesía de la lengua. De alma perennemente joven, Girondo siempre estuvo dispuesto a la nueva ola, a la invención, a la burla de todo y de sí mismo: a la aventura del lenguaje, como se ha definido su poesía. Por eso la sensación de frescura que siempre ofrece, el atractivo de quien no se acartona, no se siente derrotado por los años. Lo contradictorio gozó de su simpatía; él mismo dijo ver en lo cotidiano "una manifestación admirable y modesta de lo absurdo". En su extensa peripecia vital publicó varios libros importantes, como Veinte poemas para ser leídos en el tranvía, Persuasión de los días, Campo nuestro, En la masmédula y Topatumba (Juan Ruiz de Torres)